Siempre esperando, mirando las manecillas del reloj,
mi corazón siempre latiendo, deseando ese momento
en que mis sueños se hagan realidad, poder verte,
besarte, abrazarte, tenerte, gozarte....,
y esos momentos nunca llegan,
siempre, surgen imprevistos, ajenos a nosotros
o al menos, es lo que siempre mi corazon escucha;
que dura, es la espera, una lucha constante,
que mi alma anda en pena dia tras dia,
por tu ausencia; Y ¿cuántas veces se pregunta? si llegará,
ese día, en que podamos juntarnos y disfrutar
los momentos de amor, pasión, que mi ser necesita y,
tanto anhela, ese amor que dia a dia se va alejando,
la distancia, dicen, es muy mala consejera,
y mi corazón siente mucha pena, porque ese amor
se va apagando, como se apaga una vela,
poco a poco, su llama cada vez con menor fuerza,
aunque un dia se avive por momentos, el resto....
se va lentamente consumiendo, poco a poco.
Y la tristeza va invadiendo todo mi cuerpo,
aunque yo me resista a ello, y luche por esa llama,
por ese amor que un día fue inmenso, y quiero conservarlo
para hacerlo mio, eterno, y guardarlo muy adentro,
aunque yo, dia a dia mi corazón y mi alma,
sigan con esa llama del amor tan viva.
Aqui estaré, esperando y mirando el reloj
a cada momento, entrechando mis brazos
hacia mi corazón deseando tanto ver a mi amor.
Angela Ucher Soto
derechos reservados.